Pulgones

Control biológico de pulgones

Los pulgones se encuentran entre las plagas más dañinas en los cultivos bajo invernadero y a campo abierto, ya que provocan estrés en las plantas, transmiten virus y reducen su rendimiento. El manejo eficaz de los pulgones es esencial para mantener cultivos sanos y productivos y puede lograrse gracias al control biológico, utilizando una combinación de enemigos naturales que los atacan de diferentes maneras:

Avispas parasitoides
Mosquitos cecidómidos (mosca de la agalla)
Catarinas
Crisopas

Estos insectos benéficos atacan las poblaciones de pulgones y brindan protección continua durante toda la temporada del cultivo. Con las soluciones biológicas de Koppert para pulgones, los productores profesionales pueden lograr un control de plagas constante, mantener la calidad del cultivo, su rendimiento y sostenibilidad.

Soluciones para el control de pulgones Más información

Pherodis Fruit Fly Attractant

Aprender más sobre

¿Qué son los pulgones?
Especies de pulgón
Ciclo de vida del pulgón
Daños por pulgón
Cómo deshacerse de los pulgones
Videos de control de pulgones

¿Qué son los pulgones?

Los áfidos, comúnmente llamados pulgones, forman un grupo único y muy grande de insectos: la superfamilia Aphidoidea, perteneciente al orden Hemíptera. Los pulgones a continuación, pertenecen todos a la familia Aphididae, la cual contiene muchas especies que causan daños en los cultivos. Los pulgones más importantes que se producen en los invernaderos son:

Myzus persicae subsp. persicae (pulgón myzus) y Myzus persicae subsp. nicotianae (pulgón del tabaco) en varios cultivos vegetales, como pimientos, y ornamentales.
Aphis gossypii (pulgón del algodón), principalmente en cucurbitáceas, pero también en crisantemos y pimiento.
Macrosiphum euphorbiae (pulgón de la papa), principalmente en solanáceas, como el pimiento, y diversos cultivos ornamentales.
Aulacorthum solani (pulgón del invernadero), principalmente en solanáceas y varios cultivos ornamentales, p. ej. begonia.

Especies de pulgón

Hemiptera

Ciclo de vida del pulgón

Daños por pulgón

Dependiendo de la especie, los pulgones pueden infligir varios tipos de daños a un cultivo:

Las ninfas y los adultos extraen nutrientes de la planta y alteran el equilibrio de las hormonas del crecimiento. Como resultado, el crecimiento de la planta se retrasa, dando lugar a hojas deformadas o incluso, si la infestación ocurre lo suficientemente temprano en la temporada, causará la muerte de las plantas jóvenes. El crecimiento retardado y la defoliación reducen el rendimiento.
La savia de las plantas tiene un bajo contenido de proteínas, pero es rica en azúcares. Por lo tanto, los pulgones necesitan extraer grandes cantidades de savia para obtener suficiente proteína. Como consecuencia, el exceso de azúcar se secreta en forma de melaza, lo que hace que el cultivo y su fruto sean pegajosos. La negrilla o fumagina (Cladosporium spp. y Capnodium spp.) crece en esta melaza, contaminando los cultivos frutales y ornamentales y haciéndolos no comercializables. Al mismo tiempo, reduce la fotosíntesis en las hojas, lo que afecta la producción.
La mielecilla del pulgón puede inducir reacciones "alérgicas" fuertes, como malformaciones en los brotes.
Los pulgones pueden transmitir organismos patógenos, particularmente virus. Los virus son transmitidos principalmente por los individuos alados. El virus Y de la papa (PVY) es transmitido por los pulgones en el tomate de esta manera, al igual que el virus del mosaico del pepino (CMV) en el pepino.